Muestra de metanfetamina, droga para la cual el Kratom podría ayudar a combatir la dependencia

Kratom: ¿una cura para la adicción a la metanfetamina?

Esta planta está dando mucho que hablar, especialmente por culpa de la prensa sensacionalista. Recientemente se ha escrito un artículo en Vice bastante polémico.

El artículo lo tiene todo: drogas, terrorismo, narcotráfico… Una mezcla propia de cualquier panfleto sensacionalista.

En Thailandia hay un elevado consumo de metanfetamina (meth). Y según esta fuente, el prohibicionista gobierno Thailandés, el que ejecuta a gente por tráfico de drogas, se está planteando usar Kratom para tratar la adicción a la meth. Justamente, el mismo gobierno que ha baneado el Kratom, planta autóctona de Tailandia.

Actualización: el gobierno de Tailandia ha legalizado la posesión y cultivo del Kratom, os contamos más aquí.

Estamos ante un claro caso de sensacionalismo, apenas sustentado por la evidencia.

Primero se asocia el terrorismo islámico de la región con el Kratom (usualmente mezclado con más cosas, como codeína) y con su financiación mediante el tráfico de Kratom.

Luego, se le otorga la etiqueta de estimulante y se compara con la metanfetamina, si bien sus perfiles farmacológicos no tienen nada que ver. El efecto conseguido: dejar un rastro en el subconsciente de la peligrosidad del Kratom.

Como suele ocurrir, se prohíben plantas con propiedades terapéuticas y las investigaciones se retrasan durante décadas. Este es un ejemplo más.

¿Una idea útil?

Los usuarios de estimulantes no suelen tener una alternativa farmacológica a la que acogerse si se quieren desenganchar.

El Kratom podría ser una buena idea: podría mantener un estado hedónico basal estable (la anhedonia es un problema habitual al descontinuar los estimulantes), mientras su efecto ansiolítico podría prevenir el «craving«. Pero a falta de algún estudio serio, nos quedaremos con las dudas.

Nueva evidencia que avala su eficacia

A finales de 2023 tenemos algo más de evidencia que avale la eficacia del Kratom para combatir la abstinencia a los estimulantes, como la metanfetamina, anfetamina o cocaína.

Un análisis en las redes sociales realizado por Settle JR et al ha buscando evidencia anecdótica en aquellos que se automedican con Kratom para dejar los estimulantes. Recalcan que este uso del Kratom es más novel y está menos extendido. Se han reportado casos de éxito, pero los autores ponen de manifiesto los riesgos que pueden surgir, entre ellos la dependencia física y psicológica al Kratom.

Otro estudio en adolescentes toxicómanos en Malasia pone en relieve las motivaciones para usar Kratom:

Siguientes pasos

La evidencia que tenemos hasta ahora es limitada. Para comprobar si el Kratom es una planta eficaz para reducir el consumo de estimulantes como metanfetamina o cocaína, se necesitan estudios en condiciones controladas, dónde se pueda comparar la eficacia del Kratom versus un placebo.

Ahora que el Kratom ha sido legalizado en Tailandia, es posible que existan centros de tratamiento de drogodependencias que se animen a realizar esta clase de ensayos.

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