Kratom para la depresión: qué necesitas saber

Kratom para la depresión: 5 puntos claves a considerar

El uso del Kratom (Mitragyna speciosa) para combatir diversas enfermedades se está extendiendo a medida que se populariza en Occidente, y tomar Kratom para la depresión es una de las más habituales.

En España, la depresión es la segunda patología por la que los consumidores de Kratom españoles encuestados por KationicKratom toman esta planta, siendo la primera la ansiedad.

Encuestas con mayores muestras en EEUU nos dicen que 1 de cada 5 personas que toman Kratom lo hacen únicamente para tratar la depresión y perciben una disminución de los síntomas. La mayoría de estos consumidores son mujeres menores de 41 años

Gráfico sobre las dolencias más comunes tratadas con Kratom
Kratom para la depresión

Muchos de sus consumidores obtienen buenos resultados tratando la depresión y patologías asociadas (ansiedad, dolor).

Sin embargo, ninguna clase de tratamiento para la depresión se debe empezar sin conocer toda la información disponible para balancear riesgos y beneficios, menos aún tratándose de automedicación.

Por eso, desde este artículo ponemos a vuestra disposición los recursos necesarios para tomar una decisión informada.

Antes de probar el Kratom, debes de saber que este no ha sido autorizado en España ni en la UE para prevenir, curar o paliar ninguna patología. Es una planta nativa del sudeste asiático, por lo que no tiene uso etnobotánico tradicional en Europa. Por tanto, la responsabilidad recae en el consumidor final.

El primer paso es conocer todo lo imprescindible sobre esta planta, por lo que recomendamos empezar por nuestra guía del principiante. Ahí presentamos la información básica e imprescindible, con más enlaces para profundizar:

Si tienes más dudas sobre la seguridad del consumo del Kratom, en este artículo abordamos el tema.

El siguiente paso es comprobar si hay interacciones descritas entre el Kratom y los medicamentos que tomes habitualmente. Hemos descrito las interacciones más habituales y conocidas aquí.

A tener en cuenta: nunca suspendas la administración de ningún medicamento recetado por un especialista sin supervisión médica.

2) ¿Cómo actúa el Kratom contra la depresión?

Si ya has leído algo sobre el Kratom previamente, sabrás que es una planta compleja, ya que contiene múltiples alcaloides, cada uno de ellos con propiedades únicas. El objetivo de este artículo no es hablar de cada uno de ellos, pero si estás interesado/a en la farmacología de estos alcaloides, aquí tienes una lista con los 7 principales alcaloides del Kratom.

El principal mecanismo de acción es uno que no tiene nada que ver con los fármacos antidepresivos que se recetan en la actualidad: el Kratom es un opioide atípico.

Se sabe que los opioides son antidepresivos desde hace tiempo, e incluso se ha hablado recientemente de usarlos a dosis bajas para tratar la depresión resistente.

Sin embargo, los opiodes no son recetados para tratar la depresión, debido a sus numerosos efectos secundarios y potencial adictivo. Aquí es dónde el Kratom entra en acción

La mitraginina, su principal alcaloide, presenta agonismo del receptor mu parcial y sesgado, lo que lo hace mucho más seguro que los opioides tradicionales, y es incluso definido como un opioide de nueva generación.

El principal alcaloide del Kratom, la mitraginina, activa parcialmente el receptor mu sin provocar reclutamiento de arrestina.

Esto se traduce en un mejor perfil terapéutico:

Adicionalmente, tanto la mitraginina como la 7-hidroximitraginina son antagonistas del receptor kappa. Los antagonistas del receptor kappa han mostrado eficacia en el tratamiento de la ansiedad y la depresión.

Hay evidencias de que el Kratom puede modular otras vías, como la adrenérgica, serotoninérgica y dopaminérgica. Sin embargo, por el momento desconocemos su relevancia terapéutica.

3) ¿Hay evidencia científica que lo avale?

Al ser una planta introducida recientemente en Occidente, no tenemos la misma evidencia que tienen las fármacos aprobados para tratar la depresión. Para ello, sería necesario realizar un ensayo clínico en el que una dosis estandarizada de Kratom sea usada para tratar a pacientes que sufren depresión. Posteriormente, los resultados deben ser analizados y contrastados con un grupo control tratados con placebo. Debido al enorme costo de estos ensayos y al hecho de que el Kratom no puede ser patentado al ser un producto natural, es improbable que veamos un ensayo de tal magnitud salvo que lo financie una entidad pública.

La mayor parte de la evidencia en humanos es anecdótica: viene de la gente que se automedica con Kratom y de encuestas a sus consumidores.

Sin embargo, sí existen varios estudios preclínicos. Hossain R, Rahman MA et al (2023) realizaron una revisión de los efectos neurofarmacológicos del Kratom, entre los que incluyeron una recopilación de la bibliografía sobre sus efectos anti-depresivos.

Como vemos, la mayoría de estos estudios son en modelos animales, que son la fase previa a los estudios en humanos. Junto con la abundante evidencia anecdótica y los estudios que avalan su seguridad, se abre la puerta a ensayos en humanos para analizar su potencial anti-depresivo.

4) ¿Qué otros beneficios tiene para la gente que sufre depresión?

La depresión, en muchas ocasiones se presenta asociada a otras patologías (comorbilidad).

La ansiedad es la más común, pues está presente en un 55% de los pacientes con depresión. El Kratom, especialmente las variedades de vena roja, es ansiolítico. De hecho, la ansiedad es la principal afección por la que los consumidores de Kratom españoles se decantan por esta planta.

Los consumidores de Kratom reportan buenos resultados a la hora de combatir la ansiedad. Adicionalmente, existe evidencia científica pre-clínica que lo apoya como herramienta terapéutica. Si tienes interés, hemos elaborado un artículo completo sobre.

Otra comorbilidad muy usual es el dolor: hay una estrecha relación entre depresión y dolor, ya que serotonina y noradrenalina son neurotransmisores que regulan ambos. Muchas personas con depresión reportan solo síntomas físicos, lo que dificulta el diagnóstico. Por otra parte, el dolor crónico puede desembocar en depresión.

Al ser el Kratom un opioide, exhibe potentes efectos analgésicos. Así pues, gente depresión asociada al dolor puede verse beneficiada de esta característica.

En resumen, el Kratom puede resultar una herramienta muy eficaz para combatir la depresión ya que presenta múltiples mecanismos de acción que la atacan desde varios frentes.

5) Inconvenientes y riesgos

Una vez vistos los potenciales beneficios, toca hablar de los riesgos e inconvenientes.

En primer lugar, cada individuo responde de forma única al Kratom, debido a la idiosincrasia personal. Este factor afecta a la respuesta a todos los fármacos, no solo al Kratom. Por tanto, no toda la población con depresión se va a beneficiar por igual.

El segundo factor a tener en cuenta es la variabilidad dentro del propio producto. Es decir: a la hora de comprar Kratom, podemos encontrarnos múltiples cepas (como Thai, Bali, MaengDa…), tipos de venas distintos, etc. Además, al ser un producto de origen natural, sus características varían en cada lote, debido a las condiciones de cultivo. Esto hace que los consumidores de Kratom decidan qué variedad se adapta más a ellos mediante prueba y error, hasta dar con el producto idóneo.

El tercer factor es la dosificación. Recomendamos tomar el Kratom en forma de infusión, pero sabemos que este método es algo tedioso de elaborar y transportar. Los efectos de una infusión de Kratom no duran más de 8 horas (este factor depende también de la tolerancia), por lo que puede ser necesario dosificar varias veces al día. Desde una perspectiva de reducción de riesgos, siempre hay que buscar la dosis mínima efectiva.

El cuarto lugar es la dependencia física y psicológica. Si bien es algo que se da en gran parte de los fármacos anti-depresivos y ansiolíticos, el Kratom no está exento de ello. Las personas con depresión tienen mayor riesgo de caer en adicciones. Consumir la dosis mínima efectiva, espaciar tomas o dejarlo de consumir unos días son estrategias que reducen este riesgo.

Quinto y último factor: la tolerancia. No todo el mundo desarrolla tolerancia al Kratom, por lo que es posible beneficiarse de la misma dosis durante intervalos indefinidos de tiempo.

Sin embargo, la exposición al estrés (por ejemplo, pasar por una mala época económica o sentimental) puede llevar al consumidor a subir la dosis y desarrollar más tolerancia, como ya se ha reportado en algún caso clínico. Si quieres conocer métodos para prevenir el desarrollo de tolerancia, te dejamos un artículo.

En resumen

Esperamos que la información aquí expuesta te haya ayudado a resolver dudas y aclarar conceptos. Si te decides a probar el Kratom, deberás saber qué variedad y dosis se ajusta a ti y como respondes a ella.

  • La gente que sufre depresión asociada a ansiedad y/o insomnio se beneficia más de venas rojas sedantes, como el Kratom Bali, Sumatra o Kapuas.
  • Para casos de falta de energía, apatía o anhedonia, variedades estimulantes como el Kratom Malasio o Riau son más efectivas.
  • Con el tiempo, a base de prueba y error, mucha gente se decanta por sus propias mezclas, así como tomar diferentes variedades según el momento (como venas verdes por la mañana y rojas por la tarde).

Si decides comprar Kratom, hecha un vistazo a nuestro catálogo:

Puedes conocer más sobre cada variedad en este artículo que hemos elaborado para que puedas elegir qué Kratom te conviene más.

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